El incienso purifica y protege, creando un escudo energético. El sándalo limpia espiritualmente, barriendo las sombras. En esta alquimia de esencias, se entrelazan la protección y la purificación, creando un espacio de claridad y renovación.
Composición:
Sándalo en polvo, olíbano, cedro, carbón vegetal, biomasa de frutas, aglutinante natural y sal.
10MIN APROX.